El PSOE se destaca en la carrera con un acelerón difícil de seguir. Respecto al último barómetro, de hace sólo dos meses, en esta encuesta aumenta un 60% su intención de voto, y con esta tendencia puede incluso superar los ocho concejales que hoy se le asignan. ¿Cuáles son las claves?: Básicamente, que el partido cuenta con más moral que nunca en los últimos años, que está presentando propuestas y que Touriño se vuelca.
En febrero, cuando el barómetro estimaba sólo seis concejales socialistas, todavía el candidato, Vicente Irisarri, hacía trabajo interno: unificando y entusiasmando a los suyos, y a la vez preparando las propuestas de programa, tanto las locales como -y ahí estaba el dilema- las de Santiago y Madrid.
Pero marzo y abril lo han cambiado todo. Irisarri y el PSOE sabían que no podían ganar en Ferrol con Astano semivacío y con el puerto exterior inacabado. Y sus primeros golpes certeros han ido ahí: tienen en marcha un proceso para retirar la concesión de una parte de los terrenos del astillero de Fene y, dentro de diez días, Puertos del Estado aprobará la segunda fase de la dársena de Caneliñas.
Y a ambos anuncios se une la presentación de un Plan Ferrol, aún vaporoso, pero al que han dado un voto de confianza sindicatos y empresarios, a la espera de que se cumpla el compromiso de crear 4.400 empleos en la comarca en cinco años.
Ahora, su estrategia de prometer en positivo da dividendos y mejora su imagen, que no se desgasta porque en el acoso a Juan Juncal ha encontrado correosos ayudantes de Santiago, como la conselleira de Política Territorial.Juncal es la otra cara de la moneda. Repetiría, con esta encuesta, los mismos resultados del 2003, que le valieron para gobernar con el apoyo de IF pero que fueron los peores del PP en la historia de la ciudad.
Con el partido de Juan Fernández en retroceso respecto al 2003, Juncal no supera su techo y las continuas polémicas de la plaza de España eclipsan sus logros económicos.Queda tiempo, tanto unos como otros se guardan ases en la manga. Y contarán mucho dos claves más: el BNG de un Xoán Xosé Pita que crece en valoración y estima por su carácter dialogante, pero al que Santiago aún no ha echado grandes capotes, lo cual propicia el auge de IU; y esa alta tasa de indefinición que manifiestan sobre todo los votantes de IF, PP y Bloque. Irisarri, de momento, es el que absorbe todo el voto de castigo al gobierno. La alternativa se consolida.
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